En 2021, la comunidad de Jardín América se movilizó ante la desaparición de Aurelio Ernesto Schimpf, un adulto mayor de 79 años, cuya ausencia generó una amplia búsqueda y una ola de solidaridad. Tras años de incertidumbre y esperanza, la familia recibió la confirmación que tanto temía, aunque necesitaba: los restos óseos encontrados en julio de 2023 pertenecían a don Aurelio.
Estela, hija de Don Aurelio, se refirió al fin de un angustioso capítulo familiar tras meses de incertidumbre. «Después de dos años y cuatro meses aparecieron los restos. Cuando el dolor ya se hacía un poquito más llevadero, empezó de vuelta todo. De julio hasta ahora, pasaron siete meses otra vez. Uno empieza a calmarse y ahora revive todo. Fueron días dolorosos, pero estamos contentos, por un lado, de que podemos cerrarlo”, señaló.
El hallazgo de los restos óseos cerca de su hogar, apenas a un kilómetro y medio, fue un descubrimiento sorpresivo que trajo consigo sentimientos encontrados. «Primero me sentí aliviada, porque lo encontramos. Pero me sentí muy mal porque lo estábamos buscando muy lejos, y él estaba aquí, prácticamente en el pueblo, nomás», expresó.
La hija del septuagenario precisó que los datos proporcionados por personas que lo habrían visto la madrugada en que salió de su hogar fueron clave, debido a que describieron fehacientemente la ropa que vestía y la dirección a la que se dirigía. No obstante, a raíz de otras pistas que surgieron, de que se lo vio en Colonia Oasis, la búsqueda se disipó.
“Todavía me da rabia, me da bronca, me siento mal, porque es cierto que los vecinos que organizaron la búsqueda pasaron por esa zona, pero no lo encontraron y después se derivó la búsqueda más lejos”, lamentó. La consanguínea expresó su impotencia debido a que su padre se encontraba “tan cerquita y tal vez estuvo sufriendo algunos días y yo aquí sin saber. Tal vez le dio un paro enseguida y quedó ahí”.
Por otro lado, respecto a la identificación de los restos hallados, indicó que se confirmó gracias a las prótesis dentales de don Aurelio, un detalle que permitió a su hija tener certeza de su identidad antes de las pericias. «Teniendo el cráneo y las prótesis dentales, yo me di cuenta que era mi papá porque fui comparando con fotos», manifestó.
De esta manera, la familia y otros allegados ahora se preparan para el último adiós, planeando sepultarlo junto a su esposa que falleció en 2017.
La noticia de la confirmación generó un profundo sentimiento de cierre no solo para la familia, sino también para la comunidad que acompañó la búsqueda. «Realmente mucha gente, de toda la Argentina colaboró, porque recibí mensajes de todas partes, todo el mundo ayudaba. Es importante que se difunda el hecho de que lo encontramos y que lo vamos a poder sepultar y el va a poder descansar en paz. Estoy muy agradecida por todo», destacó.
Fuente: Misionesonline